Hola ahora desde New Zealand,
Llevo solo 3 días en el país pero ya estoy enamorado del país, de su gente, de su alimentacion y de su forma de pensar. Cosas que han llamado la atención al llegar:
Por un lado la simpatía y amabilidad de la gente.
Nada mas llegar en el aeropuerto, el policía de control de pasaportes, la mujer del cambio de moneda, los chicos de contratación de la tarjeta prepago, el hombre del autobús.... todos y cada uno de ellos, con una sonrisa en la cara, preguntando de donde venia, que venia a hacer, y deseando que pasara una buena estancia.
Si los países quieren aprender que es dar la bienvenida a los turistas, deberían aprender de New Zealand.
El primer día en el país me fui a pasear por Christchurch, y paseando por las calles, la gente te saluda y te da los buenos días, y si te ve un poco liado con el mapa, te pregunta si te pueden ayudar.
La forma de vida
La primera impresión en Christchurch es que no hay mucho trafico, los coches van pausados, sin exceso de velocidad, se ve un montón de gente yendo en bicicleta, haciendo deporte en los parques. Parece que sea un día de fin de semana, pero no lo es, es un día laborable.
Tras preguntar a mi amigo, este me comenta que es habitual ir a trabajar en bicicleta y que la gente hace deporte en cualquier momento que tienen libre. Doy fe de ello, ya que lo mismo hace mi amigo y su mujer.
De forma similar cuidan la alimentacion, a pesar de que hay muchos fast foods, mucha gente esta tendiendo hacia la comida ecológica y natural (en la radio es habitual escuchar cuñas informativas del gobierno fomentando el consumo de productos locales y con producción cercana a donde se habite).
He estado en un mercadillo local en Christchurch donde se venden productos artesanales (frutas, verduras, pollos, embutidos, etc,) y había mucha gente comprando.
Como curiosidad, nada mas llegar un vendedor ha visto mi camiseta escrita en castellano y se ha dirigido hacia mi en castellano. Se trata de un colombiano que vino con su esposa detrás de sus hijas hace 4 años. Me dice que se siente extremadamente feliz en Nueva Zelanda.Y como chascarrillo, al decirle que no me importaría vivir en el país, me comenta que tiene una hija soltera y con nacionalidad de Nueva Zelanda, que si quiero conocerla seré siempre bienvenido a su casa... por ahí tengo la tarjeta con su teléfono
La seguridad ciudadana.
Otro tema que es diferente de Barcelona es la seguridad. Mi amigo deja el coche muchas veces con las ventanas abiertas, incluso una vez se ha dejado las llaves. Le he preguntado si hay peligro y me ha dicho que no normalmente. Sus hijos de 4 y 9 años, se pasean tranquilamente por el mercado a distancia de los padres, sin ningún problema y tanto los niños como los padres están tranquilos, sabiendo que si se pierden tienen que encontrarse en un lugar.
Educacion
De manera similar a otros países anglosajones todo lo piden por favor y gracias, incluso los niños, pero a diferencia de otros países anglosajones, aquí parece decirse con el corazón (y no mirando a otra parte o con malos modales).
En los semáforos, todos paran cuando le toca, es decir, vehículos cuando se les pone rojo y peatones y bicicletas en la misma situación, y nadie se mueve hasta que el semáforo ha cambiado de color. Si te encuentras en un paso de peatones, los coches y bicicletas si paran por si quieres pasar.
El clima y entorno
Y de lo que mas me esta alucinando, es el maravilloso entorno del país, grandes zonas verdes para practicar deporte, parques, y zonas abiertas sin aglomeracion de personas.
Por supuesto, tanta zona verde tiene un precio, y este es el clima extremadamente cambiante, a menudo lluvioso. Pero, posiblemente pagaría el precio por esto.
